Galería Animal presenta Superfruits, una exposición colectiva que arroja una mirada crítica sobre la tendencia de las "superfrutas" y su arraigada presencia en la conversación actual sobre alimentación saludable y bienestar.
Conformada por obras recientes del dúo artístico Rojo & Kreß (Esperanza Rojo, Chile, 1989 - Lennart Kress, Alemania, 1995) y Pablo Rodríguez Blanco (Santiago de Chile, 1987), la muestra examina las implicaciones culturales y medioambientales de este fenómeno que, promovido por la industria alimenticia, tiene eco en figuras influyentes en las redes sociales y medios de comunicación.
Frutas como la palta, la granada o el açai, proclamadas como portadoras de mágicas propiedades antioxidantes que coadyuvan en la vitalidad y el rejuvenecimiento, llegan al terreno de la nutrición como un torbellino que despierta no solo el deseo de consumo, sino un sentido de pertenencia y estatus que los artistas atribuyen a un hábil ejercicio de marketing de la industria alimenticia.
Las obras de Rojo & Kreß, en particular, indagan sobre el lugar que ocupan las superfrutas en el imaginario contemporáneo a través de su monumentalización. El gran tamaño de sus coloridas pinturas sobre lienzos irregulares y maderas contorneadas no solo simboliza los superpoderes nutricionales y la elevación al estatus de ícono de las superfrutas dentro de la cultura del wellness, sino que sugiere una revalorización de la magnificencia intrínseca a la naturaleza.
Sin embargo, detrás de la fachada alegre y juguetona de estas obras se ocultan asuntos complejos relacionados con el marketing, el extractivismo y la sostenibilidad. La industria de la salud y el bienestar ha tejido un relato seductor en torno a las superfrutas, presentándolas como objetos de deseo y estandartes de un estilo de vida elevado. Esta estrategia no solo busca justificar sus precios elevados, sino que también proyecta un reflejo aspiracional en la sociedad y alienta el consumo a costa de un alto impacto ecológico.
Por su parte, Pablo Rodríguez aborda esta problemática a través de un ejercicio evocativo y reflexivo sobre las dimensiones diversas y entrelazadas del tiempo, la vida y la mortalidad. A partir de tres nuevos conjuntos de obras, el artista nos sumerge en una experiencia contemplativa de las tres fases de la existencia.
En primer lugar, la etapa de germinación o floración, que se materializa en cerámicas realizadas a partir de ilustraciones de frutas en pleno crecimiento, algunas más abstractas, otras de enfoque más literal. Otra serie de obras refleja el estado de latencia o suspensión, donde la incertidumbre entre la vida y la muerte se hace patente. Cerámicas monolíticas adoptan formas de tallos en torsión y troncos desprovistos de hojas y frutos, encapsulando un momento de ambigüedad o tránsito que el artista correlaciona con su experiencia vital de la mediana edad.
El tercer momento, la descomposición o pudrición, encuentra su resolución a través de una operación conceptual. Pablo extrae el peso de diversas frutas en su estado "vivo" y posteriormente en estado de descomposición, recreando los resultados en esferas de diversos tamaños. Este recurso sintético actúa como una representación visual que grafica de manera simbólica la noción de la pérdida de masa inherente a la muerte, evocando un ciclo que marca el fin de la transitoriedad de la vida.
Con un aire desenfadado, desde la tríada Rojo-Kreß-Rodríguez aflora una intertextualidad que trasciende las prácticas artísticas individuales. La iconografía del cómic, la cultura pop, la presencia de figuras y colores planos, la abstracción de objetos cotidianos y elementos naturales, y una inclinación hacia la silueta y la síntesis formal son recursos comunes a estos tres artistas.
Apelando a un lenguaje juguetón, aparentemente inofensivo, Rojo-Kreß-Rodríguez tejen no obstante una narrativa compleja. Entre las vetas de lo lúdico se esconde una crítica subyacente a la intersección entre la seducción del deseo, la maquinaria comercial y la conciencia ecológica. Sus obras, realizadas expresamente para esta exposición, establecen un conjunto de reflexiones sobre el impacto de nuestras opciones alimentarias en la sociedad y el entorno natural.
Rojo & Kreß son un dúo de artistas de Chile y Alemania. Desde 2017, Esperanza Rojo y Lennart Kreß han estado colaborando en proyectos de instalación y pintura. Viven en Dresde, son estudiantes de máster en la HfBK de Dresde y titulares de la beca estatal de Sajonia. Algunas de sus últimas exposiciones son Toolbox (2023) en el Aura Kunstraum de Düsseldorf; All Dead Do Not Enter (2022), en 550, Santiago de Chile; y Picnic (2022) en la Glaskasten Galerie de Chemnitz.
Pablo Rodríguez Blanco (Santiago de Chile, 1987) es licenciado en arte por la Pontificia Universidad Católica de Chile y Magister en Artes de Royal College of Art, Londres. Su obra se ha exhibido internacionalmente en Argentina, Reino Unido, Luxemburgo y Francia. En 2018 es seleccionado para exponer en la muestra del premio anual The VIA Arts Prize, en Londres. Su obra forma parte de colecciones privadas en Chile, Bélgica, Francia y el Reino Unido.
Conformada por obras recientes del dúo artístico Rojo & Kreß (Esperanza Rojo, Chile, 1989 - Lennart Kress, Alemania, 1995) y Pablo Rodríguez Blanco (Santiago de Chile, 1987), la muestra examina las implicaciones culturales y medioambientales de este fenómeno que, promovido por la industria alimenticia, tiene eco en figuras influyentes en las redes sociales y medios de comunicación.
Frutas como la palta, la granada o el açai, proclamadas como portadoras de mágicas propiedades antioxidantes que coadyuvan en la vitalidad y el rejuvenecimiento, llegan al terreno de la nutrición como un torbellino que despierta no solo el deseo de consumo, sino un sentido de pertenencia y estatus que los artistas atribuyen a un hábil ejercicio de marketing de la industria alimenticia.
Las obras de Rojo & Kreß, en particular, indagan sobre el lugar que ocupan las superfrutas en el imaginario contemporáneo a través de su monumentalización. El gran tamaño de sus coloridas pinturas sobre lienzos irregulares y maderas contorneadas no solo simboliza los superpoderes nutricionales y la elevación al estatus de ícono de las superfrutas dentro de la cultura del wellness, sino que sugiere una revalorización de la magnificencia intrínseca a la naturaleza.
Sin embargo, detrás de la fachada alegre y juguetona de estas obras se ocultan asuntos complejos relacionados con el marketing, el extractivismo y la sostenibilidad. La industria de la salud y el bienestar ha tejido un relato seductor en torno a las superfrutas, presentándolas como objetos de deseo y estandartes de un estilo de vida elevado. Esta estrategia no solo busca justificar sus precios elevados, sino que también proyecta un reflejo aspiracional en la sociedad y alienta el consumo a costa de un alto impacto ecológico.
Por su parte, Pablo Rodríguez aborda esta problemática a través de un ejercicio evocativo y reflexivo sobre las dimensiones diversas y entrelazadas del tiempo, la vida y la mortalidad. A partir de tres nuevos conjuntos de obras, el artista nos sumerge en una experiencia contemplativa de las tres fases de la existencia.
En primer lugar, la etapa de germinación o floración, que se materializa en cerámicas realizadas a partir de ilustraciones de frutas en pleno crecimiento, algunas más abstractas, otras de enfoque más literal. Otra serie de obras refleja el estado de latencia o suspensión, donde la incertidumbre entre la vida y la muerte se hace patente. Cerámicas monolíticas adoptan formas de tallos en torsión y troncos desprovistos de hojas y frutos, encapsulando un momento de ambigüedad o tránsito que el artista correlaciona con su experiencia vital de la mediana edad.
El tercer momento, la descomposición o pudrición, encuentra su resolución a través de una operación conceptual. Pablo extrae el peso de diversas frutas en su estado "vivo" y posteriormente en estado de descomposición, recreando los resultados en esferas de diversos tamaños. Este recurso sintético actúa como una representación visual que grafica de manera simbólica la noción de la pérdida de masa inherente a la muerte, evocando un ciclo que marca el fin de la transitoriedad de la vida.
Con un aire desenfadado, desde la tríada Rojo-Kreß-Rodríguez aflora una intertextualidad que trasciende las prácticas artísticas individuales. La iconografía del cómic, la cultura pop, la presencia de figuras y colores planos, la abstracción de objetos cotidianos y elementos naturales, y una inclinación hacia la silueta y la síntesis formal son recursos comunes a estos tres artistas.
Apelando a un lenguaje juguetón, aparentemente inofensivo, Rojo-Kreß-Rodríguez tejen no obstante una narrativa compleja. Entre las vetas de lo lúdico se esconde una crítica subyacente a la intersección entre la seducción del deseo, la maquinaria comercial y la conciencia ecológica. Sus obras, realizadas expresamente para esta exposición, establecen un conjunto de reflexiones sobre el impacto de nuestras opciones alimentarias en la sociedad y el entorno natural.
Rojo & Kreß son un dúo de artistas de Chile y Alemania. Desde 2017, Esperanza Rojo y Lennart Kreß han estado colaborando en proyectos de instalación y pintura. Viven en Dresde, son estudiantes de máster en la HfBK de Dresde y titulares de la beca estatal de Sajonia. Algunas de sus últimas exposiciones son Toolbox (2023) en el Aura Kunstraum de Düsseldorf; All Dead Do Not Enter (2022), en 550, Santiago de Chile; y Picnic (2022) en la Glaskasten Galerie de Chemnitz.
Pablo Rodríguez Blanco (Santiago de Chile, 1987) es licenciado en arte por la Pontificia Universidad Católica de Chile y Magister en Artes de Royal College of Art, Londres. Su obra se ha exhibido internacionalmente en Argentina, Reino Unido, Luxemburgo y Francia. En 2018 es seleccionado para exponer en la muestra del premio anual The VIA Arts Prize, en Londres. Su obra forma parte de colecciones privadas en Chile, Bélgica, Francia y el Reino Unido.
