Emplazada sobre una gran tarima a la altura de los ojos del público, que podrá pasear alrededor percibiendo la sensación de espacio amplificada por sonido ambiente. Se compone de 42 derricks (estractores de petróleo) activados por motores, ofreciendo un paisaje de campos de petróleo activo, el elemento más preciado de la sociedad y la política contemporáneas.
Esta propuesta forma parte de “Distribution Power”, una serie compuesta por maquetas de paisajes globales, realizadas con materiales reciclados y simples. Cada instalación incorpora electrónica, sonido, iluminación y movimientos, estimulando la evocación subjetiva que deviene en un estetismo común.
Sigismond de Vajay explica: “El titulo refleja la problemática de una posible pérdida de materia prima en un futuro cercano. No lo dejo claro ya que los derriks estan activos. No me gusta dar la totalidad del mensaje al público, sino dejarlo abierto a diferentes interpretaciones. Lo que sí quiero destacar es la existencia de un problema cuyas consecuencias son insanas. Estamos hablando de ecología y posibles pérdidas de control en relación con el consumismo global”.
Esta propuesta forma parte de “Distribution Power”, una serie compuesta por maquetas de paisajes globales, realizadas con materiales reciclados y simples. Cada instalación incorpora electrónica, sonido, iluminación y movimientos, estimulando la evocación subjetiva que deviene en un estetismo común.
Sigismond de Vajay explica: “El titulo refleja la problemática de una posible pérdida de materia prima en un futuro cercano. No lo dejo claro ya que los derriks estan activos. No me gusta dar la totalidad del mensaje al público, sino dejarlo abierto a diferentes interpretaciones. Lo que sí quiero destacar es la existencia de un problema cuyas consecuencias son insanas. Estamos hablando de ecología y posibles pérdidas de control en relación con el consumismo global”.