Liliana Iturriaga · Implosión Lineal

Liliana Iturriaga · Implosión Lineal

Implosión Lineal, es consecuencia de un proceso de investigación que la artista Liliana Iturriaga
viene realizando desde hace más de una década respecto de la relación entre el círculo y la línea,
proceso iniciado con La Sinuosidad de la Línea, primera exposición realizada en Chile en el año
2012, en la sala de arte Museo Sin Muros del Museo Nacional de Bellas Artes. Trabajo ampliado
durante estos años, restableciendo las posibilidades de expresión de la abstracción geométrica,
considerando aspectos formales como la imbricación, sobrexposición y la conformación de sistemas
modulares con especial énfasis en el círculo, proceso que culmina en la muestra Implosión Líneal
en el MAC de Valdivia en el año 2018, y recientemente en la exposición Concéntricos actualmente
en exhibición en el Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires.

Implosión Lineal, consiste en la superposición de formas circulares con trama lineal, provocando
una secuencia de movimiento producto del desplazamiento y la sinuosidad, pero en ese proceso
de traslación, al girar ambos círculos, se llega a un punto crítico, que tiene como consecuencia el
colapso o desintegración de la línea. Este acontecimiento imprevisto es provocado por una
anomalía, donde la forma, aunque contenida, se vuelve visualmente autónoma. Ya sea producto
del azar o como consecuencia lógica de la superposición y circulación, la sinuosidad provoca un
movimiento de expansión y retracción, generando un tránsito interno de carácter cinético:
entonces lo que aparece aparentemente como contención, es también la posibilidad de apertura.
De cierta manera, la artista incorpora en su obra los preceptos actuales de la física respecto de la
teoría de la expansión o la contracción aplicados a distintos fenómenos del universo. De acuerdo a
lo observado, el colapso gravitacional o ruptura hacia adentro de los cuerpos, es consecuencia de
una menor presión interior que exterior, singularidad propiciada inicialmente por el impulso y la
fuerza inaugural definiendo inexorablemente su trayectoria posterior.

Liliana Iturriaga desde su obra más temprana intenta representar el movimiento a partir de la
pulsión y el desplazamiento del brazo y de la mano, es está energía vital proveniente de su propia
corporalidad la que induce el proceso posterior conocido como sinuosidad de la línea. A
continuación, prosigue la imbricación o la reiteración de un elemento lineal, conformando una
especie de trama, dando paso finalmente a la transposición, intercalando o sobreponiendo
elementos que provocan un efecto de vibración por medio del desplazamiento de un sujeto
respecto de un objeto, lo que conocemos normalmente como cinetismo. Los dispositivos
geométricos se comportan habitualmente de manera constante, pero de modo diferente cuando
se relacionan entre sí. De esta forma Liliana Iturriaga acoge la posibilidad del accidente, la
alteración y la torsión, extremando la posibilidad de manipulación de las formas, hasta llegar a su
completa disolución, entendido en su obra como implosión, colapso gravitacional o desintegración
lineal.